El paracetamol es uno de los fármacos más prescritos y consumidos por la población chilena, con un sinnúmero de indicaciones y usos para el tratamiento de múltiples dolencias.
convirtiéndose en uno de los medicamentos más eficaces y seguros, pudiendo ser indicado en embarazadas o niños en periodos de lactancia, cuando se suministra en dosis apropiadas.
Dada su acción analgésica y antipirética (reduce la fiebre), el paracetamol está indicado para el tratamiento de enfermedades que se cursen con fiebre o dolor leve a moderado en adultos y niños. Sin embargo, no tiene capacidad antiinflamatoria como el ibuprofeno, perteneciente al grupo de antiinflamatorios no esteroideos (AINE). En este sentido, es útil para tratar dolores de cabeza, menstruales, dentales, lesiones –sin inflamación- y alivia síntomas ocasionados por una gripe simple o resfrío común.
No obstante, si los dolores o la fiebre persisten, el cuadro debe tratarse con otros medicamentos, ya que su uso prolongado, además de intoxicaciones, podría provocar reacciones y daños serios al hígado. Asimismo, debe ser evitado en pacientes con anemia, afecciones cardiacas o pulmonares (como el asma), o con disfunción renal grave.
De aquí la importancia de evitar la automedicación, aunque las dolencias sean leves. Ya en 2017 el Instituto de Salud Pública (ISP) advertía el aumento en el consumo abusivo de paracetamol, pasando de 10 mil a más de 13 mil cajas vendidas en sólo tres años, siendo uno de los medicamentos de venta libre más consumidos en el país -junto con la aspirina y el ibuprofeno-.
Por esto, es necesario que las personas conozcan los riesgos cuando se abusa de él o se mezclan con otros medicamentos que contengan el mismo principio activo. Sobre todo en el momento actual, donde la ingesta sin control podría enmascarar o minimizar síntomas de Covid-19, lo que podría agravar el cuadro de un paciente al llegar a urgencias.
Es esencial que siempre antes de administrar cualquier tipo de medicamento sepamos para qué, cómo, cuánto y cuándo debo hacerlo, según la indicación del médico tratante. Aún cuando es uno de los fármacos más seguros, la idea es que nos sirva para solucionar un problema y no convertirse en uno.
Paula Molina, Químico farmacéutico de Farmacias Ahumada